
La pobreza como privación de capacidades
Amartya Sen.
El termino pobreza es usualmente entendido desde el punto de vista de falta de ingresos económicos. Sin embargo, la pobreza real debe ser concebida como la privación de las capacidades básicas que impiden que los individuos cuenten con unas libertades fundamentales para el desarrollo de una vida digna.
Ahora bien, aunque la pobreza no pueda ser manejada únicamente como carencia de ingresos, si es cierto que determina un factor fundamental dentro de las muchas causas que influyen para que una persona se encuentre privada de capacidades. Ya que se genera una relación reciproca en donde la renta es entendida como un medio para adquirir capacidades, y al mismo tiempo estas capacidades contribuyen a un aumento de la productividad y con ello a generar mayor renta. Sin embargo, hay que tener en cuenta que la relación entre estos dos conceptos está arraigada a determinantes biológicos, económicos, socioculturales y ambientales, propios de cada individuo y del lugar en el que se desarrollen, como lo son la edad, el sexo, los papeles sociales, las condiciones endémicas y epidemiológicas, por nombrar algunos ejemplos.
En este sentido, se puede analizar que una población que cuente con bajos ingresos económicos, va a tener de igual forma, condiciones de vida poco favorables, lo que conllevaría a que los individuos adquieran con mayor facilidad diferentes enfermedades, y por ende su productividad para acceder a una renta se vea afectada, del mismo modo que si llegara a contar con una renta esta estaría dirigida en su mayoría, a los tratamientos necesarios para curarse o rehabilitarse de su enfermedad y no sería activamente aprovechada para satisfacer con las necesidades. Es por ello, que un factor importante para erradicar la pobreza de renta es brindar mejores condiciones de vida a las personas, a través de mejoras en la educación y la asistencia sanitaria, principalmente, para que las capacidades sean mucho mayores, y los individuos se sientan socialmente activos para contribuir con unos fines y por tanto, con las libertades necesarias para desarrollarse a nivel tanto individual como social.
